El limón persa, conocido científicamente como Citrus latifolia, es una variedad de limón originaria de Persia (actual Irán) y muy cultivada en países de clima cálido, como México y algunos países de América del Sur. También se le conoce como limón de Tahití o lima persa. Este tipo de limón es de mayor tamaño y tiene una piel más gruesa que el limón común. Su pulpa es jugosa y tiene un sabor más suave y menos ácido que otras variedades de limón, lo que lo hace popular para su uso en bebidas, aderezos para ensaladas y platos de cocina en general.